170 artistas de reggaetón fueron demandados: Bad Bunny, Daddy Yankee, entre otros
Escrito por PlayFM Tucumán el 4 septiembre, 2023
Steely & Clevie Productions reclaman derechos de autor por el uso indebido del ‘dembow’, ritmo original sampleado en más de mil 800 canciones.
na demanda masiva amenaza el futuro del reggaetón y la integridad de gran parte de la música pop. Y es que más de la mitad de la industria musical más relevante de la actualidad, resultaría perjudicada en caso de que los tribunales estadounidenses obedezcan al reclamo legal de Steely & Clevie, el famoso dúo de productores de reggae y dancehall de Jamaica compuesto por Wycliffe Johnson (Steely) y Cleveland Browne (Clevie). Ambos fueron figuras clave en la escena musical jamaiquina desde la década de 1980 y se les designa como los fundadores del famoso ritmo dembow, que es la base creativa del reggaetón.
¿Qué es el ‘dembow’?
¿Por qué hay una demanda contra el reggaetón?
Según documentos judiciales emitidos en California, obtenidos por DancehallMag, Steely & Clevie Productions sostiene que su riddim “Fish Market” de 1989, es una pieza musical lo suficientemente distintiva como para merecer protección legal bajo las leyes de derechos de autor de Estados Unidos. Este riddim, también conocido como “Dem Bow”, ha sido la base de numerosas producciones musicales, impulsando a muchas canciones a las listas de éxitos.
Es precisamente esta influencia y penetración en el mercado lo que ha llevado a Steely & Clevie a señalar a poco más de 170 artistas, productores y sellos discográficos en su demanda. Entre los acusados, se encuentran a luminarias como Bad Bunny, Daddy Yankee, Ricky Martin, Justin Bieber, Luis Fonsi, Pitbull, Drake, Rauw Alejandro, Jason Derulo, Enrique Iglesias, entre otros. La queja subraya la utilización del riddim en cuestión en más de mil 800 canciones publicadas desde 1995 hasta 2021.
La defensa, conformada por una coalición de artistas y respaldada por el bufete Pryor Cashman LLP, ha presentado varios argumentos buscando desestimar la demanda. Central en su argumentación es la idea de que Steely & Clevie intentan monopolizar aspectos fundamentales y universales del reggaetón. Más específicamente, argumentan que el ritmo, en su naturaleza básica, no puede ser objeto de derechos de autor.
El pulso entre ambas partes es palpable. Mientras los representantes legales de Bad Bunny y otros argumentan que el reggaetón tiene raíces y características compartidas que no deben ser objeto de monopolio, Steely & Clevie defienden su creación como una obra única que ha sido injustamente apropiada.
Lo que está claro es que este litigio podría sentar un precedente significativo en la industria musical. La demanda de Steely & Clevie fue presentada originalmente en 2021 y ampliada en abril de 2023. Sin embargo, el pasado 3 de agosto la productora jamaiquina desestimó las cinco mociones enviadas por diversos artistas acusados.
El riesgo es innegablemente elevado. Las canciones mencionadas en la demanda, que suman más de mil 800, acumulan miles de millones de reproducciones en plataformas como YouTube y han alcanzado numerosos reconocimientos, incluyendo certificaciones RIAA Platinum y Latin Platinum en los Estados Unidos.
El caso monumental recae en manos de André Birotte Jr., un juez federal de 56 años originario de Nueva Jersey, cuyos padres son inmigrantes haitianos. Es él quien, tras las audiencias programadas para septiembre de 2023, determinará si se aprueban o rechazan las mociones de desestimación presentadas.
El mundo musical aguarda con expectación los próximos movimientos en este conflicto. Las repercusiones de este caso no solo afectarán a los involucrados directamente, sino que también podrían redefinir las reglas del juego en cuanto a derechos de autor y música inspirada en otras obras. La industria, los artistas y los fans permanecen atentos a este choque titánico en los tribunales.
Fuente: Los Primeros.